CHIQUILÁ, Quintana Roo, 25 de noviembre. – El reciente aumento a 200 pesos por persona para ingresar al ojo de agua de Yalahau, impuesto por una empresa privada, representa un serio problema para la economía de cientos de lancheros turísticos, quienes advierten que los visitantes difícilmente pagarán dicha cantidad en un lugar que anteriormente era de acceso gratuito, señaló Alberto Pérez, habitante del puerto de Chiquilá.
Indicó que los prestadores de servicios deberán adaptarse a esta nueva tarifa, lo que podría afectar directamente la venta de tours tradicionales y limitar la llegada de turistas. “Definitivamente sí es un problema cada que hay un incremento, porque hay que readaptarse al nuevo cobro… yo no creo que sea el último aumento, creo que va a ir subiendo paulatinamente conforme los costos también suban”, expresó.
Pérez advirtió que, con la competencia turística actual y la disminución en la afluencia de visitantes, los lancheros podrían verse obligados a buscar otras alternativas para mantener su actividad. “Ya no es lo mismo que otros años cuando había muchísimo turista. Lo poco que llega está muy competido para poder prestar servicios”, señaló.
El entrevistado consideró que la próxima temporada de diciembre, en la que se espera un repunte turístico, podría verse afectada por el incremento de tarifas, especialmente en Yalahau, donde los tours clásicos corren riesgo de desaparecer si no se revisa la política de cobro.