CHIAPAS, 21 de octubre.- La caravana de migrantes centroamericanos avanza hacia Tapachula, Chiapas, la mañana de este domingo, aunque a unos 20 kilómetros de llegar a esa ciudad, se encontraron con personal de Migración y Policía Federal, quienes les dijeron que sería habilitado un albergue, para aplicar controles.
Las autoridades les dijeron que no frenarían su recorrido, aunque mencionaron que deben cumplir con los trámites, para regularizar su estancia en el país; si bien les aseguraron que podrían solicitar asilo, en un comunicado previo el gobierno mexicano advirtió sobre repatriaciones, y la CNDH señaló que no hay certeza sobre lo que pasará con ellos.
“No pueden continuar en territorio nacional de manera irregular”, les dijo este domingo en la carretera Francisco Echavarría, delegado del Instituto Nacional de Migración.
“Por favor, regularicen su situación migratoria, pueden tener el refugio, la condición de refugiados, si así lo desean, están en todo su derecho de solicitarla”, agregó, al conminarlos a acudir a los albergues habilitados.
Manelich Castilla, comisionado de la Policía Federal, dijo que la instrucción que recibió es que los elementos bajo su mando acompañaran el recorrido de los migrantes hacia Tapachula, para que se haga con orden.
Las autoridades han insistido a los migrantes en trasladarlos en autobuses a un albergue, habilitado para unas 5 mil personas, en el recinto ferial Expo Mesoamericana de Tapachula, pero los integrantes de la caravana han persistido en su camino independiente. En su recorrido, han recibido agua y comida de los habitantes.
Renato Sales, comisionado Nacional de Seguridad, dijo antes que los migrantes centroamericanos no serían deportados de inmediato, que ingresarían al país, pero de forma ordenada, y que serían habilitados albergues, para realizar estos procesos de control.
Parte de la caravana migrante que salió de Honduras, hace más de una semana, logró cruzar el río fronterizo Suchiate, y evadir la vigilancia de cientos policías mexicanos sobre el puente internacional, por donde solo se permitió el paso a mujeres y niños.
Sin embargo, en un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores y Gobernación advirtieron que serán sujetos a “procesos administrativos”, e incluso podrían ser repatriados.
“De los casi 900 migrantes que han buscado ingresar por cruces no formales que ponen en riesgo su vida, como el Río Suchiate, las autoridades mexicanas han procedido y procederán a rescatarlos, y serán sujetos del procedimiento administrativo que instruye la legislación mexicana y, en su caso, repatriados a su lugar de origen”, se mencionó en el mensaje oficial.
Respecto a los cerca de 2,200 migrantes que permanecían en el puente fronterizo, hasta el sábado, el gobierno mexicano mencionó que personal de la Embajada de México en Guatemala y del Consulado de México en Tecún Umán les reiteraban “la información y requisitos para su ingreso a México, y han coadyuvado para proporcionar hidratación y atención médica a los mismos”.
Las autoridades federales mexicanas detallaron que “a partir de esfuerzos de los gobiernos de Honduras y Guatemala, aproximadamente 500 personas que manifestaron voluntariamente su interés por regresar a sus lugares de origen en Honduras, fueron apoyados”.
Otras 640 personas fueron canalizadas a instalaciones del Instituto Nacional de Migración, en Chiapas, dando prioridad a grupos familiares, en particular con niños, niñas, adolescentes, mujeres, mujeres embarazadas y adultos mayores.
“Estos migrantes expresaron su interés de solicitar refugio y han sido trasladados a una instalación mexicana destinada para atenderlos por el INM en Tapachula, Chiapas”, apuntaron Relaciones Exteriores y Gobernación. (FUENTE: Animal Político)