PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 25 de Julio.- La proclamación del 26 de Julio como Día Internacional de la Conservación del Ecosistema de Mangle, fue aprobado el 6 de noviembre de 2015 por la Conferencia General de la UNESCO, subraya la importancia de los ecosistemas de manglares como “un ecosistema único, especial y vulnerable que en virtud de su existencia, biomasa y productividad aporta importantes beneficios a los seres humanos, prestando bienes y servicios a la silvicultura y la pesquería, contribuyendo a la protección del litoral y siendo particularmente importante en cuanto a la atenuación de los efectos del cambio climático y la seguridad alimentaria para las comunidades locales.”
Los manglares son ecosistemas poco frecuentes, espectaculares y prolíficos en la frontera entre la tierra y el mar. Garantizan la seguridad alimentaria de las comunidades locales. Proporcionan biomasa y productos forestales y sustentan la pesca. Contribuyen a la protección de los litorales y a la atenuación de los efectos del cambio climático y de los fenómenos climáticos extremos.
Por ello, la protección de los ecosistemas de manglares resulta esencial hoy en día. Existen graves desafíos para su supervivencia, desde la alarmante subida del nivel del mar hasta la situación de creciente peligro en que se encuentra la diversidad biológica. La Tierra y los seres humanos simplemente no pueden permitirse perder estos ecosistemas vitales.
La UNESCO ha estado siempre a la vanguardia de la promoción de relaciones nuevas y armoniosas entre las personas y la naturaleza, en que la preservación de los ecosistemas de manglares reviste especial importancia.
Con este fin, la UNESCO trabaja en todos los ámbitos y con todos los asociados para elaborar una iniciativa abierta sobre los manglares y el desarrollo sostenible. La Red Mundial de Reservas de Biosfera de la UNESCO tiene 86 sitios, de un total de 669, que cuentan con zonas de manglares.
Muchos de ellos están situados en países en desarrollo y en pequeños Estados insulares en desarrollo, como la reserva de biosfera de La Hotte en Haití y la isla de Príncipe en Santo Tomé y Príncipe, así como los manglares de Can Gio en Viet Nam. En la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO se incluyen los Sundarbans, el mayor sistema de manglares intactos del mundo, que se encuentra repartido entre los territorios de Bangladesh y la India y alberga al emblemático tigre de Bengala real. La Red Mundial de Geoparques de la UNESCO comprende también sitios de manglares, como el geoparque mundial de Langkawi en Malasia.
En México existen dos sitios Patrimonio Natural de la Humanidad reconocidos por la UNESCO que contienen manglares en su ecosistema.
En México existen dos sitios Patrimonio Natural de la Humanidad reconocidos por la UNESCO que contienen manglares en su ecosistema: la Reserva de Biosfera de Sian Ka’an, en Quintana Roo, y el Santuario de ballenas de El Vizcaíno, en Baja California.
Según datos de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), en México existen cuatro especies de mangle: Mangle rojo (Rhizophora mangle), Mangle blanco (Laguncularia racemosa), Mangle negro (Avicennia germinans), y Mangle botoncillo (Conocarpus erectus) [3], las cuales conforman el 5% del total mundial de manglares, lo que demuestra la riqueza ecosistémica de nuestro país y su importancia para el mundo.
No obstante, según los datos proporcionados por Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), en 1981 había 856 mil 308 hectáreas de superficie de manglar en el país; en 2010 el número descendió a unas 764 mil 486 hectáreas [4]. Asimismo, recientemente se ha levantado polémica sobre la destrucción de manglares mexicanos, como es el caso del manglar de Tajamar, en Quintana Roo, en el humedal más importante del Pacífico mexicano, en Nayarit, y el manglar en Baja California Sur.
Por lo anterior, resulta urgente proteger y crear conciencia sobre la importancia del ecosistema manglar para el medio ambiente y para los seres vivos que dependen de ellos.
En este primer Día Internacional de Conservación del Ecosistema de Manglares, el mensaje de la UNESCO es claro ya que, en palabras de la Directora General de la UNESCO Irina Bokova, “son ecosistemas poco frecuentes, espectaculares y prolíficos en la frontera entre la tierra y el mar. Garantizan la seguridad alimentaria de las comunidades locales. Proporcionan biomasa y productos forestales y sustentan la pesca. Contribuyen a la protección de los litorales y a la atenuación de los efectos del cambio climático y de los fenómenos climáticos extremos”.
Para llevar adelante la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible hay que encontrar nuevas vías sostenibles hacia el desarrollo en armonía con la Tierra, y ello significa preservar todos los ecosistemas de manglares.