Expertos advierten sobre riesgos de la maternidad subrogada

CIUDAD DE MÉXICO, 14 de abril.-Especialistas en el tema de maternidad subrogada pidieron a diputados y senadores prohibir totalmente esa práctica en México, al considerar que es otra forma de trata de personas y de explotación de las mujeres.
Al participar en un foro sobre ese tipo de reproducción asistida realizado en la Cámara de Diputados, advirtieron que la industria de los vientres alquilados ven a las madres como fábricas y a los niños como mercancías. Sin embargo, en ese mismo foro la senadora con licencia Mely Romero Celis anunció que en ese órgano legislativo ya se aprobó un dictamen que permitiría la maternidad subrogada siempre y cuando se justifique que quien lo solicita no puede tener hijos y que será sin fines de lucro. Antes de la intervención de Romero Celis, ahora subsecretaria de Desarrollo Rural de la Sagarpa, Irene López Faugier, catedrática de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) había advertido que en muy pocos casos una mujer puede arriesgar su salud física y psicológica a cambio de nada. “La mayoría de quienes prestan a rentan su vientre son pobres y se aprovechan de eso”, señaló.
En dos estados del país, Tabasco y Sinaloa, se permite la maternidad subrogada, por la que mujeres alquilan o prestan su vientre para tener a un hijo que entregarán a alguien más. En Querétaro se aprobó la donación de embriones sobrantes de procesos in vitro a mujeres solteras. En México no existen cifras sobre las ganancias de este mercado, pero se sabe que en la India se obtienen 2.3 millones de dólares cada año, afirmó. En ese país se han creado más de 200 mil clínicas privadas dedicadas a la maternidad subrogada.
“Es imposible poder saber si realmente no se ha pagado”, señaló Kajsa Ekis Ekman, periodista sueca, quien ha investigado varios año ese asunto. Aseveró que esa industria “es la hermana menor de la prostitución”. Están sujetas a un contrato, no pueden decidir sobre su propio cuerpo y no tienen autonomía, informó. “Odio que les digan mujer gestante, y la industria odia decirles madres porque eso les daría un derecho sobre los pequeños”, apuntó.
Subrayó además los riesgos físicos a los que se somete a las madres, pues les implantan hasta cinco embriones para tener mayor probabilidad de éxito. Habló también de los efectos psicológicos que pasan durante el embarazo y al entregar al pequeño. López Faugier indicó que ese método de reproducción asistida viola derechos humanos y es una nueva forma de violencia sexual. Además indicó que las modalidades que se admiten en Tabasco, Sinaloa y Querétaro son indebidas y se puede invocar la inconstitucionalidad de las reglamentos que la regulan. México es un país de trata de personas y es “inaudito que desde el Poder Legislativo se promueva” esta otra forma de ese delito. No porque exista se debe regular, estamos a tiempo de frenar este problema, añadió.(FUENTE: La Jornada)

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