PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 17 de septiembre. – La temporada vacacional no cumplió las expectativas para las cooperativas turísticas de Playa del Carmen. El arribo de sargazo desde abril, sumado a la falta de visitantes, derivó en una fuerte caída de las actividades marítimas y en un panorama adverso para los prestadores de servicios.
A pesar de los esfuerzos de limpieza y contención, las playas permanecieron afectadas durante gran parte del año, lo que redujo el interés de los visitantes por permanecer en la zona costera.
José Gómez Burgos, secretario de la cooperativa turística del Mar Caribe, explicó que el problema no se limita al recale de sargazo, sino también a la debilidad natural de la temporada baja, una de las más difíciles para las ciudades turísticas debido al paso de huracanes y la disminución de la demanda en septiembre y octubre.
El dirigente indicó que la flota prácticamente se encuentra detenida: de unas 50 embarcaciones dedicadas a tours de pesca, snorkel y buceo, apenas cinco permanecen activas. La baja afluencia de clientes ha derivado en cancelaciones constantes y en una reducción significativa de la operación turística.
Ante este panorama, los turistas han optado por modificar sus itinerarios hacia otros atractivos de la región, como zonas arqueológicas y cenotes, lo que agrava la situación de los cooperativistas.
Gómez Burgos subrayó que este fenómeno está generando un impacto económico considerable en las familias que dependen directamente de la actividad náutica, por lo que urgió a replantear estrategias para fortalecer al sector en medio de la crisis.