CHINA, 2 de agosto.- Luz roja para la empresa norteamericana. Entre las personas que estaban al tanto del proyecto, una estuvo en desacuerdo con la política de Google y decidió revelar un documento confidencial al diario The Intercept : Google está esperando luz verde de las autoridades chinas para lanzar una versión censurada en el país.
Por censurada entendemos, con bloqueos a algunos sitios que hagan alusión a los derechos humanos, a la democracia, la religión, las protestas pacíficas, etc. En fin, todo lo que no le agrade al Partido. El proyecto, titulado Dragonfly, estaba en el aire desde la primavera pasada pero tomó fuerza en diciembre de 2017 después del encuentro entre Sundar Pichai, CEO de Google, y Wang Huning, un dirigente del Partido comunista chino.
El motor de búsqueda estará disponible en un primer momento, a través de una aplicación disponible para Android, OS instalado en el 80% de los smartphones. Aún no sabemos si se pondrá en marcha también una versión disponible desde un navegador. Sin embargo, las cosas aún no son un hecho: Google debe obtener la autorización de las autoridades chinas y el trato parece haberse frenado un poco debido a las tensiones comerciales entre ambos países.
Pero no es la primera vez que se intenta algo así. Entre 2006 y 2010, Google lanzó una versión censurada de su motor de búsqueda en China. Frente a las críticas, la empresa decidió ponerle fin y Google.ch fue enterrado y el URL dirigido hacia Google.com.hk, su versión de Hong Kong.
Esto es saber hacer negocios de verdad: el mercado chino es inmenso – 750 millones de usuarios según The Intercept – y las ganancias que esto podría significar para Google son inmensas. A condición, por su puesto, de forjarse una buena reputación frente a su competencia china, Baidu.
La decisión de Google podría servir de ejemplo e incitar a más empresas de tecnología a lanzar sus servicios sucumbiendo a la censura. Hasta el momento, Facebook, Instagram y Twitter tienen prohibido operar en el territorio chino. Sólo queda esperar y ver hacia dónde va todo esto. (FUENTE: Konbini)