Inna se niega a ser reina

CIUDAD DE MÉXICO, 9 de marzo.- Con tan sólo 29 años, Elena Alexandra Apostoleanu, mejor conocida en el mundo de la música como Inna, se ha convertido en la reina del house, título que, si bien no le molesta, no es algo que buscaba.

“Yo reina no soy y ni siquiera quiero ser. Pero sí me alegro de que mis fans piensan en mí como si fuera una reina. Es una responsabilidad, cuando trabajo en el estudio y hago música, estoy pensando mucho en hacer algo que les guste a ellos y eso sí que se puede llamar responsabilidad, pero creo que es mucho. A mí me gusta ser la chica sencilla que canta y hace a la gente reír y bailar”, dice la rumana vía telefónica.

Tampoco se fía de la belleza que, aunque reconoce que ayuda, no lo es todo para triunfar en la música.

“Yo creo que lo más importante es tener carisma, ser vibrante, muy abierta los jóvenes y a la gente que te quiere tanto, porque puedes ser muy guapa pero no tocar a la gente ni sus corazones. Sí vale la combinación de poquito de belleza y poquito carisma, un poquito de todo, pero si sólo se es guapa, no creo que pueda trabajar”.

Inna confiesa que aún le sorprende todo lo que le ha pasado desde 2008, cuando debutó en la música.

“Todo el día pienso ¿qué tengo yo diferente de otras cantantes? De otras que trabajan mucho y tienen talento y todo. No puedo creer que me esté pasando a mí e intento hacer lo más que pueda como cantante; quiero ser un ejemplo para las personas que escuchan mi música”.

La artista de 29 años vendrá a la Ciudad de México para ofrecer un concierto el 17 de marzo en el Pepsi Center. Volver al país, asegura, le entusiasma.

“La verdad lo que más me gusta de México es la gente. Toda la energía que encuentro cada vez que voy es muy diferente y especial, la gente es muy cariñosa, la mirada que los mexicanos tienen es muy diferente, tienen paz y es algo muy natural”.

Tanto confía en sus instintos, que que Inna prefirió ignorar las advertencias sobre los peligros que le dijeron había en México.

“La primera vez que fui toda la gente me decía: ‘¡uy, México está peligroso! ¡cuidado donde caminas!’, pero nada ha pasado. No vi nada peligroso y nada fue extraño; México se queda como mi país preferido; la gente, la comida, los lugares, todo cerca de mi corazón y de Rumania. Me siento como en mi casa”, y detalla que en su show en el país incorporará las canciones de su disco Inna, que lanzó en 2015.

Catalogada también como el “volcán rumano del house”, considera que su camino en esta carrera aún es largo.

“No sé qué me hace falta hacer. Yo la verdad, quiero una familia y quiero todo lo que todas las personas quieren en la vida, pero estoy segura de que con tiempo todo se va a cumplir. Por el momento necesito una canción número 1 en el mundo”.

 

FUENTE: EL UNIVERSAL