PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 18 de octubre. – Ya instalados con sillas y una lona que los protege de los rayos solares, los vecinos de In House reclamaron que el superintendente de la CFE, José Luis Verde Serrano, ha rechazado el diálogo que les permita la reanudación del servicio de energía.
“Pagamos justos por pecadores”, es el clamor que se escucha en el plantón afuera de la empresa “de talla mundial”, y es que la mayoría de los afectados sí ha pagado sus recibos y pese a eso, hace cuatro días que no tienen luz en sus viviendas.
La compañía exige el pago de 71 millones de pesos por conexiones ilegales. Hoy en la mañana, los trabajadores externos llegaron por las camionetas y se fueron a cubrir sus rutas, mientras que el personal administrativo no laboró con el pretexto de la protesta pacífica.
“Hay que diferenciar entre las seis calles cuyas casas tienen medidor, y la parte de In House que fue invadida hace años. La CFE bajó el switch para todos, sin consultarnos ni avisarnos. Ya tiramos un montón de comida que se echó a perder”, señaló Pedro, residente de este lugar.
Debido a las altas temperaturas, los colonos duermen con las puertas y ventanas de sus domicilios abiertos, por lo que la Secretaría de Seguridad Pública reforzó el número de rondines, informó Juan Novelo, secretario general del Ayuntamiento.
José es otro vecino cuyos medicamentos para la diabetes y otras enfermedades ya no sirven, porque deben estar en el refrigerador. “Queremos dialogar, pero ellos no nos reciben”, lamentó.