HOUSTON, Texas, 6 de Febrero.- Ayer se celebró la primera Super Bowl de la “Era Trump”. Sobre el terreno de juego, todo transcurrió con la normalidad esperada, pero si hablamos de la actuación destinada a amenizar el descanso del partido, la historia cambia radicalmente.
Para empezar, Lady Gaga era la encargada de afrontar semejante reto: ser la primera gran estrella que actúa en la primera Super Bowl bajo la dirección del 45 presidente de los Estados Unidos. Y no deja de ser paradójico que haya sido precisamente ella –una acérrima defensora de la igualdad de género y de los derechos del colectivo homosexual– quien haya ostentando semejante “honor”.
El caso es que el 90% de los medios de comunicación norteamericanos estaban con las manos colocadas en el teclado, listos y preparados para redactar un artículo destinado a relatar todas y cada una de las supuestas menciones que la cantante iba a hacer a Trump.
Pero entonces Gaga cambió el guión previsto y ofreció una actuación épica que ha copado todos los titulares y que ha dejado el asunto político a un lado, al menos por unas horas. Dicho esto, sí que hubo “mensajitos” dedicados Donald Trump, pero emitidos con la elegancia que un evento así exigía.
Primer “mensajito”: Gaga abrió su actuación con una versión de This Land is Your Land, el icónico tema del cantautor norteamericano Woody Guthrie, quien se erigió como una las principales figuras de la lucha obrera a principios del siglo XX. Segundo “mensajito”: después de este emotivo inicio, la cantante miró directamente a la cámara y gritó que “somos una nación, dirigida por Dios, con libertad y justicia para todos”.
Tras la finalización del momento político (subliminal) de la noche, Gaga se metió de lleno en el show y ofreció una pieza con música y coreografía que mezclaba algunos de sus temas más icónicos como Poker Face, Million Reasons, Bad Romance y Born This Way –un himno gay destinado a reivindicar la autenticidad–.
También hubo espacio para las baladas y para el icónico piano de Gaga, pero esta parte calmada y lírica del show duró poco, porque la cantante tenía reservado un final espectacular durante el que (tal y como habían apuntado los rumores) iba a sobrevolar el estadio. Lady Gaga quedó suspendida en el aire únicamente sujeta por dos cuerdas y mientras se deslizaba por encima de todos los presentes, bailaba y cantaba como si estuviera en su hábitat natural.
Otro de los secretos mejor guardados de la actuación eran los looks que Gaga iba a lucir durante la misma. Versace fue la firma escogida por la cantante y su estilista, el diseñador Brandon Maxwell, para crear los estilismos que Lady Gaga iba a lucir en el show. “Versace ha protagonizado una parte crucial de la historia de la moda, así que ha sido una gran elección trabajar con ellos para confeccionar el vestuario”, ha explicado Maxwell en la web de Vogue USA.
Primero, Gaga lució un body de pedrería con hombreras de estilo años ochenta que, tal y como ha explicado Maxwell, estaba inspirado en la estética de la película Blade Runner –cuyo remake, protagonizado por Ryan Gosling, está a la vuelta de la esquina–, así como en otras referencias futuristas. Sin embargo, a pesar de la complejidad del este moodboard, la funcionalidad ha sido esencial a la hora de elaborar esta pieza. “Ellos (Versace) saben diseñar no sólo prendas cómodas que funcionan muy bien en las actuaciones, sino que también aportan algo a la hora de desarrollar el aspecto visual y la emoción que un escenario como el de la Super Bowl merece”, ha concluido Maxwell. El segundo look de Gaga estuvo formado por una chaqueta de cuero de corte crop top y un short de glitter.
En líneas generales, la actuación de Lady Gaga ha sido calificada como “clásica”. La música fue la verdadera protagonista y a pesar de los elegantes mensajes políticos del inicio, el resto del show se desarrolló con “normalidad” y con un claro objetivo: evitar la polémica. De hecho, la hija y mano derecha del actual presidente de los Estados Unidos, Ivanka Trump, tuiteó un mensaje destinado a felicitar a la cantante por su increíble trabajo. “Increíble actuación de Lady Gaga. Sus letras (y su reputación) hablan por sí solas”, escribió Ivanka una vez finalizada la actuación.
El senador republicano Marco Rubio, también quiso felicitar a la cantante vía Twitter. “Lady Gaga ha hecho una gran actuación. Uno de los mejores shows de la Super Bowl que ahora mismo puedo recordar”, tuiteó Rubio. Así pues, intuimos que el show ofrecido por Gaga ha contado con el beneplácito del partido que ahora mismo dirige Estados Unidos, aunque la cantante dijo lo que quería decir de una forma muy elegante. ¡Bravo, Gaga! (FUENTE: Vogue España)