BERLÍN. – En Alemania miles de personas protestaron en las calles de Berlín el sábado contra las restricciones impuestas por el gobierno para combatir la pandemia del coronavirus, una marcha que los organizadores llamaron “el fin de la pandemia” —un acto que coincide con la creciente preocupación de las autoridades ante un repunte en los contagios en Alemania.
Los asistentes silbaron y aplaudieron, con pocas mascarillas a la vista, durante la marcha que partió de la Puerta de Brandenburgo por un amplio bulevar que atraviesa el parque Tiergarten, en el centro de la capital alemana.
Los manifestantes, provenientes de distintos lugares del país, portaron carteles con lemas como “Corona, falsa alarma”, “Nos obligan a llevar un bozal”, “Defensa natural en lugar de vacunación” y “Somos la segunda ola”.
Los agentes de policía usaron megáfonos para pedir a los manifestantes que respetaran las normas de distanciamiento social y se colocaran cubrebocas, aparentemente con poco éxito. Las autoridades informaron a través de Twitter que presentaron una denuncia penal contra los organizadores de la marcha por no cumplir con las reglas sanitarias establecidas. Poco después informaron que los organizadores habían dado por terminada la protesta.
La policía calculó que aproximadamente 17.000 personas participaron en la marcha. Los agentes lograron mantener a los manifestantes alejados de personas que realizaron una contraprotesta y que coreaban “¡Fuera los nazis!”
Los manifestantes continuaron con marchas subsecuentes en un bulevar que cruza el parque Tiergarten de la ciudad y a las cuales acudieron unas 20.000 personas, según cifras de la policía.
Las protestas contra las restricciones para combatir el COVID-19 han atraído a una amplia variedad de gente, incluyendo algunos conspiracionistas y populistas de extrema derecha.
A diferencia de los gobiernos de Estados Unidos, Brasil y Gran Bretaña, las autoridades alemanas han sido elogiadas en todo el mundo por su manejo de la pandemia. La cifra de muertos en el país por el virus —poco más de 9.150 de los más de 210.670 casos de contagios confirmados hasta el sábado— es cinco veces menor a la de Gran Bretaña, que tiene una población menor.
Alemania comenzó a relajar la cuarentena a finales de abril, pero mantiene las normas de distanciamiento social, además de la obligatoriedad de llevar mascarilla en el transporte público y en tiendas.
Los contagios aumentaron en las últimas semanas y las autoridades pidieron a la población que no se confíe.
Con información de Ap News