PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 22 de julio. – La labor que desde hace más de una década emprendió un grupo de buzos con la observación responsable de tiburones toro en las costas de Playa del Carmen ha detonado un creciente interés por parte de autoridades, iniciativa privada y turistas, consolidando esta actividad como una tradición anual que inicia cada noviembre.
Ramón Magaña, instructor certificado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) en prácticas de atracción y observación del tiburón toro, destacó que este esfuerzo debe trascender generaciones para asegurar la conservación de esta especie emblemática del Caribe mexicano.
“Para que ellos puedan seguir con esta bonita tradición y enfocarlos más a lo que es la conservación de un recurso natural muy importante como es el tiburón toro”, expresó.
Magaña explicó que a lo largo de los años se ha conformado una red de colaboración entre permisionarios, autoridades ambientales, el sector turístico y los propios visitantes, con el objetivo de desarrollar una actividad sustentable que proteja tanto a los ejemplares como a su hábitat.
Señaló que actualmente el trabajo coordinado ha permitido fortalecer las medidas de observación responsable y reforzar el enfoque de conservación que da sentido a esta experiencia única en Playa del Carmen, considerada uno de los destinos clave para el avistamiento del tiburón toro en el mundo.