KANTUNILKíN, Quintana Roo, 13 de octubre. – El presidente de la Red de Ejidos de Lázaro Cárdenas, Jacobo Ay Che, pidió a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) investigar la venta y traslado de maderas duras y preciosas hacia la isla de Holbox, comercializadas, según él, en enormes troncos de chicozapote y cedro que no contarían con los permisos correspondientes para su corte.
Señaló que la isla tiene mucha demanda de maderas duras y preciosas, ya que son ideales para la construcción de hoteles, pero que provocan un grave daño al medio ambiente ya que implica la tala de árboles verdes, aún no maduros.
Ay Che no descartó que las maderas duras y preciosas sean taladas ilícitamente en el ejido de Kantunilkín, o en otros cercanos, a espaldas de los ejidatarios, por eso pidió a la Profepa investigar estos hechos para evitar daño a esos recursos forestales.
Según el líder ejidal, cargamentos de chicozapote y cedro son comercializados en la isla de Holbox, “aprovechando que la Profepa brilla por su ausencia” y son trasladados descaradamente, a pesar de que, “a simple vista”, puede notarse que se trata de maderas verdes.
Finalmente, dijo que es necesario que las autoridades federales investiguen la procedencia de estos cargamentos ya que cada tronco de árbol puede costar, como mínimo, 15 mil pesos, que no caen en manos de los ejidatarios a quienes la autoridad impide talarlos por el daño que provocan al medio ambiente.