KANTUNILKÍN, Quintana Roo, 18 de diciembre. – La actividad turística en Holbox depende en gran medida de la experiencia que los visitantes perciben desde su llegada y durante su estancia, pues una buena impresión convierte al turista en promotor del destino, mientras que una mala experiencia puede derivar en cancelaciones y reducción de la afluencia, señaló el empresario local Limbert Zapata Bacelis.
El prestador de servicios reconoció que la isla, particularmente sus hoteles, ha obtenido diversos galardones y reconocimientos de revistas especializadas; sin embargo, subrayó que la imagen de Holbox debe sustentarse en hechos constantes y no sólo en reputación previa. Afirmó que es necesario que todos los sectores turísticos se involucren para mantener un estándar de calidad que responda a las expectativas del visitante.
Zapata Bacelis destacó que cualquier incidente que afecte al turista genera un impacto inmediato en la actividad económica, traducido en disminución de reservaciones y menor demanda de servicios. No obstante, estimó que para el cierre de año la ocupación hotelera podría alcanzar el 100 por ciento, lo que representaría una derrama económica favorable para la isla y sus prestadores de servicios.