Cancún, Quintana Roo.— La implementación de la jornada laboral de 40 horas representa un reto para el sector del transporte público, que deberá reorganizar sus turnos y esquemas de servicio sin afectar a los usuarios ni a los operadores.
Arnulfo García Veloz, secretario general del sindicato de Autocar Cancún y secretario adjunto del Comité Ejecutivo Nacional del sector, explicó que el cambio implica un desafío importante debido a las particularidades del rubro, como el tráfico, las condiciones climáticas y los accidentes que alteran constantemente los tiempos de traslado.
“Es un poquito complejo, pero al final tenemos que ir viendo cómo lo vamos a ir compaginando. Tenemos de aquí al 2030 para ajustar las ocho horas que se van a reducir paulatinamente. Manejamos primero, segundo y tercer turno, porque damos servicio desde la madrugada. Hasta ahora seguimos analizando cómo se van a generar los tiempos”, señaló.
El líder sindical afirmó que actualmente se encuentran en una etapa de análisis para definir la manera de implementar la reducción, la cual podría implicar incluso ajustes en el número de unidades o en los horarios del servicio.