JOSÉ MARÍA MORELOS, Quintana Roo, 08 de septiembre. – Habitantes de colonias irregulares en este municipio enfrentan una realidad marcada por la carencia de servicios básicos y la falta de inversión pública, debido a que los terrenos donde se ubican son de carácter ejidal, lo que limita la intervención de las autoridades municipales.
En la colonia Santa Cruz, apenas seis familias se encuentran asentadas sin acceso a agua potable, energía eléctrica ni infraestructura vial adecuada. Fernando Castillo, uno de los colonos, explicó que esta situación ha llevado a muchos habitantes a trabajar fuera de la zona y regresar solo por las noches.
“No hay agua, no hay luz, no hay nada de eso, el camino también está un poco malo, pero como nos dicen todas las autoridades municipales que han pasado, no pueden invertir porque es ejidal”, comentó.
Ante la ausencia de servicios básicos, los pobladores han recurrido a sistemas fotovoltaicos para contar con iluminación y alternativas de abasto de agua. Pese a las dificultades, destacaron que el tamaño de los terrenos representa una ventaja, pues les permite mantener huertos y granjas de traspatio sin las restricciones que existen en áreas urbanas densamente habitadas.
La situación mantiene a estas familias en un estado de incertidumbre, atrapados entre la imposibilidad legal de urbanizar y su esfuerzo por establecer condiciones mínimas de vida. Mientras tanto, el contraste entre la amplitud de sus terrenos y la ausencia de servicios evidencia las contradicciones del crecimiento irregular en José María Morelos.