Xcaret abre sus puertas a la magia del Día de Muertos

Paola Chiomante

PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 31 de octubre de 2024. – La 18ª edición del Festival de Tradiciones de Vida y Muerte, organizada en el Parque Xcaret, arrancó en un ambiente místico lleno de velas, flores de cempasúchil y la promesa de que “en Xcaret, los muertos están más vivos que nunca”. Este año las actividades se celebran del 30 de octubre al 3 de noviembre y está dedicado a Quintana Roo, que cumple 50 años como entidad federativa.

El acto inaugural fue un despliegue de color y tradición. Entre los asistentes estuvieron dignatarios mayas, el representante de la UNESCO Andrés Morales, el presidente de Grupo Xcaret, Miguel Quintana Pali, y la directora del Instituto de la Cultura y las Artes de Quintana Roo, Lilian Villanueva, y Bernardo Cueto , secretario de Turismo de Quintana Roo. Morales destacó el esfuerzo de Xcaret en la preservación de la cultura, recordando que en 2008 la UNESCO declaró el Día de Muertos como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, parte de un legado que incluye cantos, cocina tradicional y festividades que se transmiten de generación en generación.

El recorrido inaugural invitó a los visitantes a explorar espacios emblemáticos del parque, como el Panteón, el Pasaje de las Almas y la Hacienda Henequenera, donde se mezclaban aromas de antojitos tradicionales, flores y una energía especial que honra a los que ya no están. Lilian Villanueva celebró la labor de Xcaret como una plataforma mundial que combina turismo y cultura, mientras que Leticia Arreguebere, directora del festival, resaltó que esta edición representa el entrelazamiento de la vida y la muerte en un abrazo que enriquece la identidad y las tradiciones mexicanas.

El toque final de esta primera noche estuvo a cargo de la cantautora Silvana Estrada, quien, entre guitarras y melodías, brindó un emotivo concierto en el Foro Abierto que dejó huella en cada asistente. El festival promete más días llenos de arte, música y costumbres para quienes buscan conectarse con el verdadero espíritu del Día de Muertos.