Advierten sobre la inseguridad de los mototaxis en Playa del Carmen; autoridades limitadas para intervenir

PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 30 de agosto. – El servicio de mototaxis en Playa del Carmen ha generado preocupación por su creciente inseguridad, según la consultora en materia urbana y de movilidad, Adriana Martínez. La experta afirmó que, basado en estudios recientes, los mototaxis representan un riesgo significativo para los pasajeros, principalmente debido a las altas velocidades que alcanzan en avenidas de primer y segundo nivel.

Martínez recordó que el sistema de mototaxis surgió originalmente como una opción de autoempleo para los operadores, permitiendo el traslado de pasajeros desde vías terciarias hasta puntos cercanos donde pudieran abordar transporte público convencional. No obstante, la consultora denunció que el sistema ha sido corrompido por la ambición de algunos, quienes han adquirido múltiples unidades para operarlas en rutas, y por la influencia de los sindicatos, que han desvirtuado por completo el objetivo original del servicio.

“Acuérdate de que lo que no dice la Ley está permitido; eso provocó la proliferación de unidades y abusos, porque no está realmente regulado que transiten por las avenidas de primarias o secundarias. Entonces, como vas en una moto a altas velocidades, quedas muy vulnerable”, explicó Martínez.

Por su parte, Guillermo Galland Guerrero, director de transporte en Solidaridad, reconoció las irregularidades existentes en la operación de los mototaxis, especialmente en cuanto a su circulación fuera de los polígonos autorizados. Sin embargo, Galland Guerrero destacó la complejidad de intervenir en este problema, ya que, por ley, el control de los mototaxis recae en el Instituto de Movilidad de Quintana Roo.

El director también mencionó que, a pesar de que los mototaxis a menudo violan las normativas establecidas, su área no tiene la facultad para imponer multas o regular el tabulador de precios, que en algunos casos supera incluso las tarifas de los taxis convencionales.

La situación plantea un desafío para las autoridades locales, quienes, a pesar de estar conscientes de las irregularidades y los riesgos asociados al servicio de mototaxis, se encuentran con las manos atadas debido a la falta de autoridad para regularizar o sancionar estas prácticas. Mientras tanto, los usuarios continúan expuestos a un servicio que, según los expertos, es cada vez más peligroso.