BRASILIA, 9 de Mayo.- El presidente interino de la Cámara de Diputados de Brasil, Waldir Maranhao, anuló hoy el trámite que ha dado lugar al proceso que le puede costar el mandato a la presidenta Dilma Rousseff, confirmaron fuentes parlamentarias. La decisión de Maranhao, cuyas consecuencias jurídicas todavía no están claras, fue adoptada en momentos en que el Senado se apresta para una votación que puedeseparar a Rousseff del poder durante al menos seis meses y se apoya en supuestas irregularidadesobservadas en el trámite seguido en la Cámara baja.
Maranhao, quien asumió la presidencia de la Cámara de Diputados la semana pasada, en lugar de Eduardo Cunha, quien fue suspendido del cargo por la Corte Suprema, aceptó una demanda presentada por la Abogacía General del Estado. Ese organismo, que defiende a Rousseff en el proceso, denunció “vicios que declaran nula de pleno derecho” la sesión del pasado 17 de abril en la que 367 de los 513 diputados aceptaron las denuncias contra la mandataria y dieron lugar al trámite.
Maranhao, en una nota divulgada hoy, explicó que uno de esos vicios consistió en que los partidos políticos representados en la Cámara de Diputados orientaron el voto de sus diputados, lo que no podría haber ocurrido en una decisión de esa naturaleza. No podrían los partidos políticos orientar una cuestión para que sus parlamentarios votaran de un modo u otro, toda vez que debían hacerlo de acuerdo a sus convicciones personales y libremente”, explicó Maranhao.
El Gobierno y la propia Abogacía General del Estado han alegado que el proceso para la posible destitución de Rousseff comenzó por una supuesta “venganza” de Cunha, un declarado adversario de la mandataria implicado en las corruptelas en la estatal Petrobras. Por su supuesta responsabilidad en ese escándalo, la Corte Suprema suspendió la semana pasada el mandato de Cunha y su lugar fue asumido por Maranhao. La decisión del presidente interino de la Cámara baja, la primera que adopta desde que reemplazó a Cunha el pasado viernes, ha dejado en el limbo la votación que debe celebrar el Senado esta semana para decidir si se abre un juicio con miras a la destitución de Rousseff.
La presidenta se enteró de la noticia este lunes durante un acto público, pero dijo que aún no tenía la información oficial. Desconozco sus consecuencias. Tengan cautela, vivimos una coyuntura de mañas y artimañas”, afirmó antes de lanzarse a saludar a los efusivos asistentes que gritaban “¡No al golpe!”, declaró Rousseff. Precisamos defender la democracia, luchar contra el golpe, luchar contra todo ese proceso extremadamente irregular”, añadió.
OPOSICIÓN APELARÁ
Por su parte, los principales partidos de la oposición en Brasil anunciaron hoy que presentarán un recurso ante el Tribunal Supremo para intentar revocar la decisión con la que el presidente interino de la Cámara de Diputados, Valdir Maranhao, anuló el juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff. Presentaremos un recurso este mismo lunes para que el Supremo Tribunal Federal anule esa decisión”, afirmó el diputado Pauderney Avelino, dirigente del partido Demócratas (DEM).
Según Avelino, Maranhao, que asumió el comando de la Cámara baja el jueves pasado luego de que el Tribunal Supremo suspendiera el mandato del hasta entonces presidente de los Diputados, Eduardo Cunha, no tiene poder para tomar una decisión tan trascendental.
Él no podía tomar esa decisión. El proceso ya salió del ámbito de la Cámara de Diputados y se trata de un proceso jurídico perfecto. Presentaremos un recurso para que se respete el voto de los 367 diputados que aprobaron la apertura del juicio”, aseguró.
La decisión del DEM de recurrir a la corte suprema fue respaldada por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), el principal partido de la oposición. Fue un abuso del presidente en ejercicio de la Cámara. Vamos a presentar un recurso ante el Supremo debido a que la aprobación del juicio político en la Cámara baja fue un acto jurídicamente perfecto, que respetó los ritos establecidos por el Supremo Tribunal Federal”, aseguró el diputado Antonio Imbassahy, dirigente del PSDB.
La decisión de la oposición también recibió el respaldo de la Orden de Abogados de Brasil (OAB, colegio de abogados), que analiza recurrir ante la Corte Suprema. Si el pleno del Senado, por mayoría simple entre sus 81 miembros, se inclinara por la apertura del proceso, Rousseff sería separada del cargo durante los 180 días que pudiera durar el juicio y durante ese período sería reemplazada por el vicepresidente Michel Temer. El vicepresidente, también enemistado con Rousseff, completaría el mandato que vence el 1 de enero de 2019 en caso de que el Senado destituyera a la mandataria, lo cual dependerá de las consecuencias que pueda tener la decisión anunciada hoy por Maranhao.(FUENTE: El Excélsior)
Los comentarios están cerrados.