CHETUMAL, Quintana Roo, 02 de marzo del 2024.- El Centro de Atención para Personas Adultas con Discapacidad (CAPAD) emerge como un refugio de apoyo y desarrollo para personas con discapacidad. Bajo la dirección de Paolina de Lourdes Carrillo Murillo, CAPAD se ha dedicado a acompañar tanto a adultos con discapacidad como a sus familias, enfocándose en el desarrollo de sociabilidad, comunicación, habilidades ejecutivas y bienestar general.
El centro, que celebra su primer aniversario, ha sido testigo de la resiliencia y el crecimiento de su comunidad. A pesar de los desafíos personales, incluidas las pérdidas familiares que inspiraron a Carrillo Murillo a iniciar este proyecto, el CAPAD se ha convertido en un espacio de amor y aprendizaje constante. “A través de la pérdida uno aprende y aprende a amar,” reflexiona Carrillo Murillo, quien, junto a un equipo de tres profesionales, trabaja incansablemente para evitar el estancamiento y retroceso en el desarrollo de los asistentes.
El objetivo de CAPAD es claro: no dejar a ninguna persona adulta con discapacidad sin el apoyo necesario para mantener o desarrollar sus habilidades. Carrillo Murillo tiene grandes ambiciones para el futuro del centro, aspirando a que todas las personas con discapacidad tengan la oportunidad de forjar amistades, comunicarse efectivamente y disfrutar de una salud óptima. Este sueño se extiende más allá de las fronteras de Chetumal, buscando influir en la percepción y trato hacia la discapacidad a nivel nacional e internacional.
Muchos de los beneficiarios del CAPAD enfrentan trastornos del espectro autista, lo que hace que el trabajo en las áreas social y de comunicación sea especialmente crítico. Carrillo Murillo y su equipo están comprometidos a abrir el mundo a sus asistentes, ofreciéndoles las herramientas necesarias para construir un futuro más inclusivo y comprensivo.
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