Diego Luna festeja con amigos

CIUDAD DE MÉXICO, 21 de Enero.- Tras el éxito que alcanzó con el estreno de Rogue One: Una historia de Star Wars y luego de haber sido captado en Tu­lum junto a la británica Suki Waterhouse, el actor Diego Luna asistió la noche de este miércoles al Teatro Insur­gentes para develar la placa conmemorativa de las 100 representaciones del musical El hombre de la mancha, pro­tagonizada por Benny Ibarra, Ana Brenda y Carlos Corona.

Muchas gracias por invitarme a ser padrino de tan importante noche, tan emo­cionante. Me da muchísimo gusto festejar con ustedes (elenco) y con ustedes (púbi­co) que representan a quienes han llenado este teatro por más de cien representaciones y que seguro lo seguirán lle­nando por muchas semanas más, meses, años. Esta noche sentí muy bonito y deseo que muchos se unan a este senti­miento”, expresó Luna, quien pidió un reconocimiento a los músicos de la obra.

Acompañado de Tina Ga­lindo, Morris Gilbert y Claudio Carrera, productores del mu­sical, Diego Luna arrancó una carcajada de los asistentes cuando comentó que se sen­tía contento de acompañar a Benny Ibarra, a quien escu­chaba cuando él era pequeño.

Gracias por esa adora­ble Dulcinea, gracias por ese entrañable Quijote. A Benny, crecí escuchándolo. Sí, como muchos de ustedes, pero, además, luego en la adoles­cencia tuve la fortuna de crear una amistad y has sido una inspiración Benny. Es un or­gullo verte tomar estos riesgos y hacerlo así”, subrayó Luna.

Luego de estas palabras y de agradecerle a los produc­tores por montar este tipo de obras que resultan esperan­zadoras ante un panorama sombrío, el también director de cine se dirigió a una es­quina, por instancias de Mo­rris Gilbert, para girar una manivela y bajar la placa con­memorativa que caía sosteni­da por unas cadenas, parte de la escenografía.

El charolastra agradeció a los involucrados que hicieron posible esa puesta en escena que, aunque conmemora­ba las cien representaciones, en realidad se develaba en la representación 125, debi­do a que se cumplieron en diciembre, en medio de las fiestas.Pasados los 12 minutos en los que estuvo Diego Luna sobre el escenario, se dio por concluida la develación y el intérprete, de 37 años, entre abrazos y saludos de mano, abandonó el estrado para ingresar a la parte trase­ra del recinto, donde convi­vió un rato con el elenco y los productores.

A las 11:55 de la noche, Diego Luna salió por del re­cinto, acompañado de unos elementos de seguridad y aunque fue abordado por la prensa en los segundos que duró su trayectoria hacia un jeep que le esperaba, el ac­tor no emitió palabra alguna y sólo se limitó a esbozar sonri­sas y saludar con la mano.

Ya al interior del vehículo, Luna dio la indicación de to­mar Insurgentes Sur, llaman­do la atención de los curiosos que veían cómo la prensa se abalanzaba hacia el automó­vil para tener alguna reacción del actor que ha estado liga­do al teatro, debido a su padre Alejandro Luna.(FUENTE: El Excélsior)