Horrible caso de violencia familiar en Cancún deja a un niño fallecido y a otro gravemente herido

CANCÚN, Quintana Roo – Un desgarrador caso de violencia familiar ha sacudido a Cancún, después de que un niño de dos años muriera a causa de una brutal golpiza y otro menor, de seis años, fuera rescatado con heridas visibles. Las autoridades de los tres órdenes de gobierno han activado una alerta para dar con el paradero del responsable.

El incidente ocurrió alrededor de las 2:00 de la madrugada de este miércoles, cuando una mujer llegó al área de urgencias del Hospital General con su hijo menor, quien posteriormente fue declarado sin vida. Las primeras investigaciones señalaron que el niño había sido víctima de una agresión brutal, presuntamente a manos de su padre.

Durante el interrogatorio inicial, la madre reveló que tenía otro hijo en su domicilio, también con signos de violencia. Inmediatamente, policías y paramédicos se dirigieron a la vivienda en Villas Otoch Paraíso, en la supermanzana 259, donde encontraron al menor de seis años. El niño fue trasladado al hospital para recibir atención médica urgente.

El presunto agresor logró escapar, y un operativo de búsqueda se desplegó en coordinación con autoridades locales y personal del C5. El mototaxi que el sujeto conducía fue hallado en el estacionamiento de un supermercado en la avenida Kabah con Chetumal, supermanzana 225. En la unidad, las autoridades encontraron manchas rojas que podrían estar relacionadas con el caso. Durante el operativo, las cámaras de seguridad detectaron a un hombre que coincidía con la descripción del sospechoso en la avenida Los Tules, supermanzana 247. Sin embargo, tras una revisión, se determinó que no era la persona buscada.

La madre de los menores ha sido puesta a disposición del Ministerio Público, donde se continuará con las investigaciones para esclarecer este trágico incidente. Las autoridades locales han intensificado la búsqueda del agresor y exhortan a la ciudadanía a proporcionar cualquier información que pueda ayudar a localizarlo.

Este doloroso caso resalta la necesidad de redoblar esfuerzos en la lucha contra la violencia familiar y proteger a los menores en situación de riesgo.