Javier Solís dio a la canción ranchera un toque modernista

CIUDAD DE MÉXICO, 21 de mayo de 2016.- La media voz y la manera de cantar de Javier Solís no han sido superadas desde su muerte (19 de abril de 1966), sus cualidades vocales fueron un don de la naturaleza, afirmó el bolerista Carlos Cuevas, quien habla con conocimiento de causa, pues ha estudiado canto y ha tratado de interpretar los altos y los bajos de Solís, en un intento infructuoso.  Lo anterior lo dijo en conferencia de prensa, en la que se presentó un material que sintetiza lo grabado por Javier, El rey del bolero ranchero, titulado A 50 años del aniversario luctuoso de Javier Solís y La absoluta colección, Javier Solís a 50 años. Es decir, los cedés más devedé deben su génesis a un justo homenaje a cinco décadas de la partida física del intérprete de Llorarás. La absoluta colección… contiene dos álbumes de lujo en formato de dos cedés más un devedé, con 52 audiograbaciones cada uno, cinco videos, ocho karaokes con sus acompañamientos originales y una histórica entrevista en la que Javier Solís narra su historia de artista.

Disco con sorpresas

Jorge Ibarra, artífice del trabajo duro para crear este material, especialista en el catálogo de Sony Music, a quien se conoce como El arqueólogo musical, expuso que en el volumen 1 destacan éxitos como Sombras, Luz de Luna, Esta tristeza mía, Julia, En mi viejo San Juan, Se te olvida, Qué va, Gracias, Carabela, Una limosna y Granada. “En el volumen 2 se hacen presentes los éxitos Payaso, Tu voz, Las rejas no matan, Espumas, Renunciación, Cuatro cirios, Silverio, Noche azul y En tu pelo. Ambos materiales cuentan adicionalmente con grabaciones que habían permanecido fuera del mercado en los recientes 15 años y otras que, por vez primera, se publican en cedé.

A cinco décadas de haber partido, Javier sigue teniendo fans por millones. Un mito que perdura es que Pedro Infante vende actualmente y desde hace años más discos que Solís, pero eso es mentira. El mayor vendedor al respecto es Javier, lo que ocurre es que a Pedro lo mantienen más presente en los medios sus películas. En la plática, Blanca Estela Sáenz, viuda de Solís, respondió a la pregunta sobre el gusto de quien fuera su esposo de vestirse de payaso, algo que hacía seguido: Él decía y decía que no iba a llegar a ser un hombre mayor, por no decir que viejo. Aseguraba que si Dios lo dejaba más tiempo, él se iría a vivir a un circo donde nadie lo conociera, pues no quería causar lástima para nadie. Todos los años iba al circo Atayde a dar una función para los actores de la Casa del Actor de la Anda. Los mismos payasitos de ahí lo maquillaban. Le agradaba vestirse de payaso porque se le semejaba que eso es como la vida. Hallaba coincidencias.

Expuesto, en un perchero, estaba el traje de payaso de Javier, con vivos rojos y azules, así como sus grandes zapatos rayados. “Este traje se lo ponía cada vez que en una fiesta iba a cantar Payaso. Esto no lo hacía siempre, sino sólo en dos ocasiones: en Los Ángeles, California, y en el circo Atayde, cuando se reunía con sus amigos.”

Carlos Cuevas: Estos discos son un homenaje a uno de los mejores cantantes del mundo. Lo sigue siendo. Es el Frank Sinatra mexicano, sin lugar a dudas. La mayor influencia que tengo en el bolero no es por los tríos ni por los grandes como Pepe Jara, sino por Javier Solís. Su voz no creo que alguien la pueda superar. Blanca Estela añadió que han surgido otros cantantes con más recursos publicitarios que Javier, pero acá lo importante es que no ha necesitado que se convoque para recordarlo. En el cementerio le hacemos homenaje en su aniversario luctuoso, el 19 de abril, y la gente llega. Va mucha. Sigue sólo con lo que dejó grabado, a pesar de que otros graban y graban. Descubrimos temas que muchos no saben que él grabó. Compositores como Rafael Carreón, Fernando Z. Maldonado, Agustín Lara siguen y son joyas, pero Javier solito ahí va. Hay artistas que no llegan ni a los 15 años y se les olvida. Jorge Ávila, gerente de catálogo de Sony Music, dijo que él entró hace 30 años a la compa- ñía, cuando era CBS Interna- cional. Yo estaba en producción y maquilábamos productos de Peerles, como los de Pedro Infante, y el de Columbia, donde está Javier. A la fecha, la venta de Solís duplica a la de Infante. A Javier se le respeta por su voz.

Pablo Dueñas, de la B Grande de México, añadió que Pedro tiene cercanía con los jóvenes por las películas. En nuestras estaciones siempre es más solicitado el material de Javier. Pedro Infante es como el mambo: tiene un impacto visual y auditivo, pero Javier es como el chachachá, que no tiene un gran impacto, pero su secuela es mucho mayor. A Javier le tocó darle a la canción ranchera un modernismo extraordinario. Finalmente, Ibarra adelantó: En noviembre saldrá al mercado una colección con todos sus discos. (FUENTE: La Jornada)

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