Negligencia y descuido cobran la muerte de un niño de 8 años
PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 11 de Junio.- Gabriel de 8 años de edad, jugaba en la azotea de la cuartería en la que viven sus padres desde hace año y medio, por descuido tocó una línea de energía eléctrica y falleció. Nadie imaginaba este triste desenlace, porque apenas tenía dos días que viajó de Chiapas a Playa del Carmen para estar al lado de sus progenitores.
La falta de mantenimiento en las líneas de suministro de la electricidad doméstica, por parte del propietario de la cuartería en donde ocurrió el accidente y el descuido de los padres provocó que el pequeño Gabriel muriera de manera casi instantánea por la descarga eléctrica.
El Director de Protección Civil informó que al parecer el niño se encontraba jugando en la azotea de la cuartería donde acababa de llegar a vivir cuando tocó un cable de corriente eléctrica en mal estado y recibió una descarga eléctrica, nada pudieron hacer los cuerpos de emergencia al atender al menor ya que fue fulminante el latigazo eléctrico.
El funcionario indicó que diversos propietarios de edificios y más aún en las cuarterías, no le dan mantenimiento a sus propiedades, lo que genera graves peligros para sus inquilinos, en este caso, la negligencia le arrebato la vida al menor.
Recomendó a los padres de familia estar atentos de las actividades y juegos de sus hijos, ya que sólo se requiere de un pequeño descuido para que ocurra un accidente o pierda la vida, como en este caso.
Exhorto a los adultos a acomodar o guardar adecuadamente escaleras portátiles o en su caso suprimir entradas de escalinatas para evitar que suban los menores a las azoteas y evitar incidentes.
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