TULUM, Quintana Roo, 19 de agosto de 2025.- Tras confirmar que hubo afectaciones a la duna costera en la Bahía de Solimán, el Juzgado Octavo de Distrito en Quintana Roo ordenó a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ejecutar directamente la restauración del ecosistema devastado por el proyecto inmobiliario Adamar.
De acuerdo con Mónica Huerta, integrante del área legal de la organización Derecho al Medio Ambiente Sano (DMAS), la sentencia establece que la autoridad ambiental no puede ignorar el daño ni delegar la reparación en la empresa infractora.
“Este fallo obliga a la autoridad ambiental a ejecutar de inmediato la restauración del ecosistema afectado. El juez determinó que no basta con imponer multas o clausuras, sino que Profepa debe garantizar la mitigación y devolver el sitio a su estado original, antes de las obras y actividades antropogénicas realizadas en el lugar”, explicó.

La acción legal fue promovida por un habitante de Tulum con el acompañamiento jurídico de DMAS. En cumplimiento de la sentencia, Profepa cuenta con 35 días para notificar a la empresa, iniciar la demolición de las construcciones y supervisar el proceso de restauración. Además, la inmobiliaria deberá cubrir las multas que superan el millón de pesos.
Este fallo marca un precedente en materia de justicia ambiental en Quintana Roo, al obligar a la autoridad a garantizar la restauración de los ecosistemas y no limitarse a sancionar administrativamente a las empresas que ocasionan daños irreversibles.

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