JOSÉ MARIA MORELOS, Quintana Roo, 29 de agosto. – Con apenas 23 años, Ana Juana Bautista Escamilla se ha convertido en una de las voces más firmes del activismo juvenil en Quintana Roo. Originaria de la zona maya e identificada como persona indígena no binaria, su trayectoria académica y social la llevó a ser distinguida con el Premio al Orgullo México 2025, en la categoría Activista, gracias a su proyecto Najil Xookil.
La joven, estudiante de Gestión y Desarrollo de las Artes, ha acumulado reconocimientos a nivel local, estatal y nacional: obtuvo el segundo lugar estatal en el Encuentro Científico de las Juventudes de Quintana Roo en el área de Humanidades y Ciencias de la Conducta; el reconocimiento nacional al Mérito Estudiantil en Acción Social en Solidaridad; y fue seleccionada como una de las 14 lideresas y líderes antirracistas del país por Racismo MX. Además, ha sido becada por Santander, Fundación Coppel y Fundación COLMEX, lo que le permitirá fortalecer su formación académica en el Colegio de México.
“Defiendo derechos humanos porque creo en una vida libre de violencia”
En entrevista, Bautista Escamilla señaló que su activismo surge de una convicción personal y de su propia historia de vida:
“Yo defiendo derechos humanos porque soy de la idea de que todas las personas, en cualquier situación, edad o raza, debemos ser acreedores a los mismos derechos. Creo en una vida libre de violencia y busco generar espacios donde las personas puedan sentirse cómodas sin ocultar su verdad”
Reconoció que muchas de las luchas que encabeza nacen de las experiencias de discriminación que enfrentó en su niñez, cuando vivió episodios de racismo, homofobia y clasismo.
Con el respaldo de una familia que la apoyó para vivir su identidad con libertad, Ana Juana no dudó en alzar la voz cuando enfrentó acoso en la Universidad Intercultural Maya de Quintana Roo, demostrando congruencia entre su discurso y sus acciones:
“Si tanto hablo de defender derechos humanos, ¿por qué no defender los míos? Sería incongruente no hacerlo”
Su activismo formal comenzó hace apenas dos años, pero ya ha dejado huella. La ONU México la nombró Embajadora Juvenil por Quintana Roo, siendo la primera persona abiertamente no binaria e indígena en recibir este reconocimiento.
Su proyecto Najil Xookil, que combina arte textil, salud mental y juventud, ha recorrido diversas comunidades de Quintana Roo, promoviendo talleres de sensibilización para universitarios y jóvenes que migran en busca de oportunidades educativas.
“Najil Xookil es un espacio para que los jóvenes hablen abiertamente de lo que les pasa, de la salud mental y de cómo actuar a partir de lo que sí tenemos”
Además de su activismo, Ana Juana ha sido parlamentaria juvenil y presentó la primera iniciativa para adicionar el artículo 11 Bis a la Ley para Prevenir y Erradicar la Discriminación en Quintana Roo, enfocada en la protección de poblaciones históricamente marginadas.
Su nominación y triunfo en los Premios al Orgullo México 2025 representan un hito para la visibilidad LGBTQ+ en el sur y centro de Quintana Roo, en un esfuerzo por construir una sociedad más justa, incluyente y libre de violencia.

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