PLAYA DEL CARMEN, Quintana Roo, 15 de enero. – Representantes de comunidades indígenas lamentaron la falta de inclusión en la convocatoria del Plan Nacional de Desarrollo del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, ya que únicamente se realizará una mesa de trabajo en la ciudad de Morelia, Michoacán. Esta decisión, aseguran, dificulta la participación de los pueblos originarios debido a las limitaciones económicas y de logística para trasladarse al occidente del país.
Hermelindo Be Cituk, coordinador en Quintana Roo de la Asamblea Nacional Indígena Plural por la Autonomía (ANIPA), expresó que esta estrategia parece diseñada para desincentivar la participación indígena. “Los maya hablantes no cuentan con los recursos necesarios para viajar, lo que prácticamente los excluye del proceso”, señaló. La consulta está programada para el próximo 19 de enero.
Por su parte, el sacerdote maya Luis Nah destacó que el costo estimado para asistir a Morelia supera los 20 mil pesos, considerando gastos de avión, hospedaje y alimentación. En sus palabras, esta situación representa una “burla a la que ya estamos acostumbrados” y criticó la simulación de legalidad detrás del foro.
“Nos convocan a participar en el Plan Nacional de Desarrollo, pero no facilitan los medios. Es como si quisieran que nadie asista. Esto no es consulta, es exclusión.” – Luis Nah, sacerdote maya.
Los representantes indígenas recordaron que, en administraciones anteriores, estos foros se realizaban en cada entidad de la República, permitiendo una mayor participación. Ahora, al centralizar el evento, consideran que se limita la representación y se perpetúa una dinámica de exclusión hacia las comunidades indígenas.
Luis Nah ironizó sobre la situación, sugiriendo que en futuros planes nacionales los foros podrían realizarse en Estados Unidos o Europa para que “cada vez vaya menos gente”. La indignación crece entre los líderes indígenas, quienes exigen un diálogo real e incluyente, con mesas de trabajo accesibles y con mayor alcance territorial.
Ante este panorama, los representantes de ANIPA y otras organizaciones indígenas han solicitado al gobierno replantear la convocatoria, descentralizando las mesas de trabajo y apoyando económicamente a los participantes indígenas. Consideran que, sin estos ajustes, el Plan Nacional de Desarrollo carecerá de legitimidad y no reflejará las necesidades y demandas de las comunidades originarias.
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