Tejones arrasan milpas en la comunidad de Rojo Gómez; campesinos piden apoyo para proteger sus cultivos

JOSÉ MARÍA MORELOS, Quintana Roo, 13 de octubre. – En el campo, las crisis a veces llegan en manadas. Así lo viven los campesinos de la comunidad de Rojo Gómez, donde los tejones se han convertido en una amenaza constante para las milpas, devastando en una sola noche el trabajo de meses y las esperanzas de quienes dependen de la tierra para sobrevivir.

El comisario ejidal, don Martiniano Pech, de 85 años, relató que la situación se ha vuelto insostenible. A su edad sigue cultivando su parcela, pero ahora siente que libra una batalla desigual contra los animales que, atraídos por el maíz maduro, invaden los sembradíos y los dejan vacíos.

“Estoy en la milpa desde las tres de la mañana, pero sin tiros no sirve. No tengo registrada mi carabina y así no me venden los cartuchos”, lamentó el octogenario.

La fauna silvestre reclama su territorio, pero los campesinos aseguran que las restricciones en la compra de cartuchos y armas de fuego les impiden siquiera defender sus cultivos. Explican que no buscan matar a los animales, sino ahuyentarlos con disparos al aire, una práctica que durante generaciones había servido para mantener a raya a tejones y otros depredadores del campo.

“Nosotros no queremos cazar, solo espantarlos; un tiro al aire bastaba antes, pero ahora ya no se puede”, expresó don Martiniano, quien asegura que la mayoría de los labriegos de la zona enfrentan la misma problemática.

Las pérdidas se acumulan y con ellas el desánimo de quienes, año con año, retoman el arado con fe en la tierra, aunque la adversidad se presente bajo la forma de una plaga inesperada.

Los campesinos de Rojo Gómez piden apoyo a las autoridades para encontrar alternativas que les permitan proteger sus cosechas sin infringir la ley, pues cada mazorca representa el alimento de sus familias y el fruto de su esfuerzo