CHETUMAL, Quintana Roo, 18 de junio. – La gobernadora del estado, Mara Lezama Espinosa, informó que durante lo que va de su administración se ha logrado reducir la deuda pública a largo plazo de Quintana Roo en más de 3 mil millones de pesos, como parte de una estrategia financiera enfocada en el ahorro, la eficiencia del gasto y el combate a la corrupción.
Durante una intervención pública, la mandataria enfatizó que esta reducción representa un hecho sin precedentes en la historia del estado, al ser la primera vez que se logra disminuir de forma significativa el endeudamiento estatal sin adquirir nueva deuda.
“A veces se cree que la deuda es de los gobiernos, pero en realidad le pertenece al pueblo. Si hay deuda, hay menos aportaciones federales, menos ingresos propios, menos inversión en obra pública. Hoy podemos decir con orgullo que la deuda a largo plazo ha bajado en más de 3 mil millones de pesos”, señaló.
Lezama explicó que esta disminución ha permitido mejorar la calificación crediticia del estado y liberar recursos que antes se destinaban al pago de intereses. Subrayó que una deuda alta compromete la inversión en infraestructura, salud, educación y programas sociales, al limitar el margen de acción del gobierno.
La gobernadora también hizo un llamado a reflexionar sobre el endeudamiento acumulado por administraciones anteriores, donde, dijo, se contrataban créditos de corto plazo que no se pagaban en tiempo y forma, generando una carga financiera que impactaba directamente a la ciudadanía.
“Todo lo que se destina a intereses es dinero que no llega al pueblo. Por eso hoy hablamos no solo de reducción de deuda, sino de rendición de cuentas, de responsabilidad y de una nueva manera de gobernar”, sostuvo.
En un tono más personal, Lezama compartió una anécdota con estudiantes durante una visita reciente a una escuela, en la que niñas le preguntaron por qué su gobierno sí estaba logrando hacer lo que otros no hicieron.
“No es solo porque sea mujer, es porque hay compromiso, voluntad y un equipo que trabaja por el bien común”, expresó.
La administración estatal ha reiterado que el objetivo es garantizar que los recursos públicos se destinen a las verdaderas necesidades de la población, como infraestructura educativa, servicios públicos, salud y desarrollo social, en lugar de ser consumidos por intereses de deuda mal administrada.

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