Un físico nos explica cómo le hace Santa Claus para repartir los regalos

Lo que necesitas saber:

Un físico nos explica los números detrás de Santa Claus y la misión que tiene todos los años para entregar los regalos.

Uno podría pensar que esta nota tumbará todas las ilusiones sobre la existencia de Santa Claus, pero es todo lo contrario. Si bien Papa Noel la tiene bastante complicada para hacer su chamba todas las Navidades, en teoría no es imposible.

Pero ¿cómo y cuándo? El maestro en ciencias Hernando Caicedo Ortiz nos explica la magia detrás de Santa.

Santa Claus inmune a COVID-19 en Navidad
Foto ilustrativa: Getty Images.

Los números detrás de Santa Claus

Recientemente Hernando Caicedo Ortiz, maestro en ciencias físico-matemáticas con especialidad en astrofísica, ofreció una conferencia bastante interesante en el Centro Astronómico Clavius de la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México.

Y antes de explicar por qué Santa Claus sí puede existir, hablemos de los números a los que el viejito panzón se tiene que enfrentar todos los años.

De acuerdo con datos del 2023, en la Tierra hay más o menos 8 mil millones de personas. Más, menos.

La UNICEF estima que de toda la población mundial el 26% son niños, es decir, 2 mil 200 millones de niños en el planeta. Ahora, si tomamos como referencia que por cada casa tenemos un promedio de 3 niños (es un cálculo nomás para que las cuentas funcionen), entonces tenemos 700 millones de familias. 

Niño escribiendo una carta a Santa Claus
Foto: Pexels

Ahora, el profesor de la Ibero en CDMX explica que suponiendo que cada familia vive en una casa o departamento, Santa Claus tendría que visitar 700 millones de casas distintas en todo el mundo. 

Esto implica, a su vez, aproximadamente 6 mil 273 casas por segundo. Acá te dejamos la fórmula que el profesor usó para explicar los cálculos y ojo con esto ¿por qué aparecen ahí 31 horas si el día tiene 24 horas? Guarden la pregunta porque más adelante la resolvemos.

Foto: Hernando Caicedo Ortiz

Entonces, si decimos que Santa debe visitar 6 mil 273 casas por cada segundo para que le de tiempo surtir a todas las casas del planeta, entonces por cada casa tiene aproximadamente 0.16 milisegundos. 

Es decir, en ese pequeñísimo tiempo tiene que frenar los renos, entrar a la casa por la chimenea o arreglárselas para que el perro no se lo trague, dejar los regalos, recoger las galletas, tomarse la leche, regresar con los renos y avanzar a la siguiente casa.

Solo para que nos demos una idea de qué tan poquito tiempo es. 0.16 milisegundos es el tiempo que pasa entre que picas una tecla en el teclado de tu computadora y aparece la letra en la pantalla. Una cosa pero bárbara.

Ahora… ¿cuál es la distancia que Santa tiene que recorrer? Bueno, el área habitable de la Tierra es de 150 millones de kilómetros cuadrados, es decir, la superficie en donde los humanos podemos vivir porque, digamos, en el mar es complicado.

Santa Claus viendo la tele
Giphy

Si las casas del planeta estuvieran distribuidas a la misma distancia y tuvieran el mismo tamaño, entonces tenemos que Santa tiene que recorrer 320 millones de kilómetros todas las Navidades. 

Y solo para no dejar y que podamos imaginar qué tanto es: esa distancia es 2.1 veces la distancia entre la Tierra y el Sol.

Pero Santa Claus sabe cómo ganar tiempo

Si el día tiene 24 horas, uno podría pensar que Santa tiene 24 horas para terminar la chamba. Pero es más inteligente de lo que nos imaginamos y sabe cómo ganar más horas.

Para ganar unas cuantas horas más, Santa Claus comienza la entrega de regalos en la Línea Internacional de Cambio de Fecha (IDL, por sus siglas en inglés), a las 10 de la noche del 24 de diciembre pero en dirección contraria al movimiento de la Tierra.

Y haciendo esto gana unas 8 horas más de tiempo por el simple hecho de la diferencia horaria.

Va un ejemplo: Mientras en las Islas de Navidad (en el sudeste asiático) son las 7 de la tarde del 24 de diciembre, en Galway (el puerto de la costa oeste de Irlanda) son las 5 de la mañana del 24 de diciembre y las 6 de la tarde del 23 de diciembre en la Samoa Americana.

Foto: Hernando Caicedo Ortiz

Entonces, como Santa viaja en el sentido contrario del movimiento de la Tierra, pues va ganando tiempo. Mientras unos niños ya despertaron el 25 y están abriendo los regalos, Santa está entregando apenas algunos regalos en otra parte del mundo. Es decir, no tiene 24 horas sino 31 horas y pico disponibles.

Y con esto podemos saber la velocidad a la que Santa viaja: 100 millones de kilómetros por hora. Tan rápido que viaja más rápido que la velocidad del sonido, de hecho, 82 mil veces la velocidad del sonido.

¿Y el peso de los juguetes?

Si ya en este punto los cálculos van en contra de Santa Claus, todavía hay que agregar a la ecuación una cosa importantísima: que va cargado con los juguetes de todos los niños del mundo.

Si cada niño recibiera un regalo de un kilo, entonces Santa tendría que mover 600 mil toneladas de juguetes. Bueno, en teoría son 8 renos los que van a jalar ese peso gigante.

Ahora, Santa no es una varita de nardo. Si en cada casa Santa se come la leche y las galletas que le dejan, al final de su jornada habría consumido 396 billones de calorías que lo harían más pesado.

Va un breve resumen de a lo que Santa se enfrenta para poder entregar los regalos a tiempo:

  • Tiene que visitar 700 millones de casas
  • Visita 6 mil 273 casas por segundo
  • Tiene aproximadamente 0.16 milisegundos por casa
  • Recorre 320 millones de kilómetros 
  • Como empieza en la Línea Internacional de Cambio de Fecha y en sentido contrario al movimiento de la Tierra, no tiene 24 horas sino 31. Gana 8 horas. 
  • Viaja a 100 millones de kilómetros por hora
  • Tiene que mover 600 mil toneladas de juguetes
  • Consume 396 billones de calorías de leche y galletas
Foto: Pexels

¿Santa Claus tiene un trineo de última generación o cómo le hace?

Bueno, lo primero que Caicedo Ortiz explica es que cuando superas la velocidad del sonido hay una onda de choque que no se puede evitar. Es como una explosión.

Ahora, la fricción a esa altísima velocidad carbonizaría a los renos, por lo que necesitaría un trineo con nanotecnología que resistiera semejante cosa. Y todavía no es todo… ¿cómo entra a las casas?

En la antigüedad era común ver que las casas tuvieran chimeneas pero ahora ya es bastante raro. Cómo le hace Santa Claus para entrar si no es forzando las chapas de las puertas.

Pues Santa tiene una máquina de teletransportación cuántica, nos explica el también maestro en ciencias de la complejidad. Ahista, facilito.

Foto: Pinterest

Lo increíble de todo esto es no estamos hablando de ciencia ficción sino de algo que existe. Estos dispositivos no transportan la materia, sino la información. 

Es decir, para poder reconstruir cualquier cosa física solo se transporta la información de cómo están organizados los átomos de cualquier objeto. Digamos, como fichas de lego que se reconstruyen en otro lado. 

Eso sí, el Santa original tendría que destruirse para poder reconstruirse en otro lugar porque no se puede clonar. No lo decimos nosotros, lo dice la ciencia.

Foto: El Deforma

Ahora, si ya sabemos cómo le hace Santa para moverse… ¿cómo prepara la ruta para entregar los regalos en el menor tiempo posible? Seguro le preguntó a Amazon… 

Si tomamos la teoría de grafos, por ejemplo, para entregar solo 20 regalos Santa tiene 2 trillones 432 mil 902 billones 8 mil 176 millones 640 mil rutas posibles distintas. Esto solo puede resolverse con computadoras y no cualquiera… computadoras cuánticas. Presupuesto hay, dices tu.

Y si tiene equipo tan sofisticado, cuántico, entonces es lógico que Santa viva en el Polo Norte, porque necesita un sistema de enfriamiento bárbaro para tooooodo el proceso. Qué mejor en el lugar más frío del planeta.

¿Y si Santa Claus usa otros trucos?

¿Agujeros de gusano? Esta sería una manera de evitar la onda de choque de la que el experto Hernando Caicedo nos habló anteriormente.

Pero ¿un agujero de qué? Si ya vieron Interestelar seguramente lo entenderán porque es la forma con la que los astronautas pueden viajar en otra parte del Universo.

Digamos que se trata de “doblar una distancia” para crear un puente a través del espacio y el tiempo a través del cuál podrías pasar. Entrar al agujero de gusano en Metro Balderas y salir en París.

Foto: Hernando Caicedo Ortiz

¿Usará la teoría de la burbuja en la Métrica de Alcubirre? Para esto estaría viajando más rápido que la luz e involucra a materiales con densidades negativas.

La masa negativa es una masa que si la empujo y le doy una fuerza en cierta dirección, la masa se va a mover en la dirección contraria. En el 2018 ya se encontró la primera evidencia experimental de masas negativas a nivel cuántico”.

Foto: Hernando Caicedo Ortiz

¿Y si no existe solo un Santa, sino muchos Santas? “Hablamos de un Santa, cuántico, macroscópico”, dice el experto.

Porque claro, Santa va a entregar regalos pero también está en los centros comerciales, visita a enfermos en los hospitales y demás actividades de promoción de la Navidad.

Para ello Santa tendría que saberle a esto de la teoría del multiverso de Hugh Everett. Ándale, sí, como el Spiderverse y todas estas películas de superhéroes con infinitas posibilidades.

Foto: Hernando Caicedo Ortiz

La superposición de estados cuánticos permite que Santa aparezca simultáneamente en todos los centros comerciales al mismo tiempo”… ¿ven? Facilito.

Pero entonces ¿cuál es la conclusión? Uno pensaría que entre más avanza la tecnología y los descubrimientos de cómo funcionan las fuerzas físicas del Universo la teoría de la existencia de Santa Claus quedaría destrozada, pero no es así.

De hecho, cada vez aparecen más explicaciones que apoyan la idea de que Santa sí puede hacer su chamba tal y como nos lo cuentan nuestros papás.. ¿la tiene complicada? Sí ¿le sale bastante caro el chiste? POR SUPUESTO ¿es imposible? cada vez menos.

Si quieren echarle un ojito a esta increíble conferencia, donde el profesor explica más a profundidad, acá mero se las dejamos. No tiene pierde.

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Vía Sopitas.com

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